La industria valenciana de la madera y el mueble ha sido el motor del sector español en cuanto a diseño, producción y exportación. Sin embargo, en los últimos años ha sufrido una fuerte ralentización de su crecimiento y una notable pérdida de competitividad debida al aumento de las importaciones procedentes de países de bajo coste (China, India, Brasil, Rusia y Este de Europa).
Una manera de frenar estos procesos es mejorar la competitividad del sector mediante la reducción de los materiales desperdiciados y la implantación de mejores y más rápidos controles de calidad.
De ahí que el proyecto, Mejora de la calidad y durabilidad de los productos de la madera y de los dispositivos existentes de evaluación de la calidad de la madera, desarrollado por AIDIMME, trata de analizar el sector y posibles soluciones en cuanto al diseño, producción y exportación para así poder frenar el decrecimiento actual del sector.
El sector del mueble se enfrenta a un nuevo escenario competitivo y económico que requiere de cambios estructurales en profundidad. Se trata de implantar un concepto integral, más amplio, de bienes y servicios del hábitat, con un proyecto propio de empresa.
Además, cuestiones como la deslocalización productiva, los países emergentes, la I+D+i, las nuevas tecnologías de la información, los nuevos formatos de la distribución, el capital intelectual y otros conceptos han de estar presentes en la gestión empresarial.
La situación actual y los retos futuros requieren de un modelo de empresa que sea más comercial y capaz de transformarse en un verdadero centro generador de valor añadido, a través de actividades como el diseño, la logística, los acabados, la distribución o el servicio.
En general, las empresas han de mejorar su capacidad de desarrollar nuevos productos, invertir en marca y en una potente red de distribución, innovando y formando continuamente, adaptándose a cada situación de forma rápida y flexible y, en definitiva, apostando por una diferenciación que les aporte ventajas competitivas sostenibles.