El cartón ondulado es uno de los materiales más empleados en el mundo para agrupar, almacenar, transportar y vender productos de consumo. Y es un sector en constante innovación para adaptarse a las demandas de los distintos eslabones de la cadena de suministro con envases versátiles, prácticos y atractivos y que garanticen la seguridad e higiene.

Para ello, el centro tecnológico ITENE ha puesto en marcha una estudio pormenorizado de todas las operaciones que implica la transformación de bobinas de papel en cajas de cartón ondulado. Desde la recepción de las materias primas hasta el servicio al cliente, con el fin de identificar qué partes del proceso pueden influir en el cumplimiento o no de la normativa y legislación vigente en materia de contacto alimentario.

Con ello la empresa puede asegurar con datos objetivos que su proceso productivo no introduce sustancias tóxicas o peligrosas para la salud, tal y como indica la legislación vigente para materiales en contacto con alimentos, pudiendo actuar en los puntos que se considere más críticos, dando con ello una respuesta fiable a la demanda de sus clientes en materia de seguridad e higiene.  

Además se va a estudiar la incorporación de materiales y tratamientos mejorados para la fabricación de cartón.

Para ello cuentan con la colaboración de Cartonajes La Plana, empresa castellonense de referencia en el sector del cartón ondulado en nuestro país y que ha sido una de las primeras empresas españolas dedicadas a los envases y embalajes de cartón ondulado en obtener el certificado Good Manufacturing Practise Standard (GMP) de la FEFCO (European Federación of Corrúgate Borde Manufactures).

Cartonajes La Plana ha obtenido la certificación BRC-IOP, gracias a las mejoras realizadas por la organización en el control de la producción y tras evidenciar que los envases comercializados por esta son 100% seguros y aptos para contener productos alimentarios.