En la industria del mueble, gran parte de las reclamaciones de los consumidores se debe a la presencia de golpes, arañazos o defectos de acabado. Habitualmente, el origen de estas incidencias no está en el proceso productivo (sometido a controles de calidad, tanto internos como externos) si no en el ciclo de distribución.
Por ello, el Clúster da Madeira y el CIS Madeira, AIDIMME y cinco empresas gallegas de los sectores del mobiliario de hogar, mobiliario de cocina y puertas han participado en el proyecto Estudio de mejora en embalaje y transporte en empresas del sector de madera (E.M.E.T.-MADEIRA), que ha elaborado un Manual de buenas prácticas en el embalaje.
Este Manual recoge el análisis del proceso de embalaje, transporte y almacenaje, identifica riesgos y propone mejoras con el objetivo de reducir el número de incidencias.
El proyecto E.M.E.T.-MADEIRA ha contado con una serie de objetivos iniciales fijados:
- Desarrollo de nuevas técnicas de embalaje, nuevos diseños o mejoras en el embalaje y distribución del producto.
- Establecimiento de procedimientos que faciliten al sector la mejora en los procesos de embalaje y distribución, con el fin de reducir o eliminar las incidencias en los productos finales.
- Respuesta a una problemática común de las empresas del sector de la madera representadas por el Cluster da Madeira.
- Revisión de las rutas de distribución del producto final y evaluación de las condiciones en que se produce el proceso de ditribución.
- Identificación de la relación entre las incidencias en las productos finales que registran las empresas con el proceso de distribución del producto final.
- Caracterización de los materiales utilizados en el embalaje.
- Evaluación de los sistemas de embalaje utilizados.
- Reducción de los incidentes durante la manipulación y transporte para la mejora del servicio y satisfacción del cliente final, así como la reducción de costes debidos a las disconformidades de este.
- Fomento de la utilización eficiente de los medios y materiales para el embalaje.
- Gestión correcta del área de embalaje.
- Mejora en el conocimiento de las empresas de su propio proceso de distribución del producto para identificar puntos clave para la reducción de las incidencias.